Las termas de Necochea y Tapalqué, en la provincia de
Buenos Aires, a solo un par de horas de la Capital Federal, convocan a un
destino ideal para disfrutar en cualquier época del año y hacer una escapada de
fin de semana entre médanos y campos.
Termas del Campo, en Necochea
A 41 kilómetros del centro de Necochea se
encuentra el complejo Médano Blanco, Termas del Campo, una propuesta
ideal para quienes desean una estadía de relax, entre médanos y campos verdes.
La belleza del entorno se conjuga con las aguas cloruradas
saladas de las piscinas que surgen a seiscientos metros de profundidad a una
temperatura de 38.3 compuestas con cloruro, sodio, sulfato, calcio y magnesio.
Esos minerales se destacan por sus propiedades descongestivas, desestresantes,
antisépticas, cicatrizantes, tonificantes, antiinflamatorias, analgésicas y
desintoxicantes.
El complejo abre de miércoles a domingos y
dispone de dos piscinas de aguas termales cubiertas, otra recreativa y dos
hidromasajes al aire libre; de un spa de campo con gabinetes, camillas de
última generación, circuito hídrico con sauna, baño de vapor, salas con
hidromasaje y ducha escocesa. Para las infancias ofrecen playroom con juegos de
mesa, encastre, ping pong y en el exterior, una plaza con juegos.
Al llegar, los visitantes se encuentran con el casco
de estancia de estilo nórdico que se construyó en 1925 y perteneció a la
familia de Alfredo Rasmussen, inmigrante danés que llegó a finales del siglo
XIX.
En la casona funcionan la galería de arte local, oficinas
del complejo y el Rural Restó.
Según precisó la subsecretaría de Turismo bonaerense,
con las termas, este destino costero diversificó sus propuestas no compite con
el mar ya que las termas se pueden disfrutar también en temporada baja o media.
”Es el producto turístico que permitió empezar a hablar de turismo todo el año
en Necochea”, aseguró Matías Sierra, secretario de Turismo y Desarrollo
Productivo.
Noticia de : Diario Rio Negro